El buceo con tiburones es uno de los sueños de muchos buceadores, y esta actividad seguramente no te dejará indiferente.
Mucha gente puede considerar que los tiburones son criaturas despiadadas, que esperan en el mar a que los humanos los ataquen, pero la realidad es muy diferente.
La mayoría de los tiburones son esquivos y muy cautelosos con los buceadores. El riesgo de ser atacado por tiburones es muy bajo y el riesgo se puede reducir aún más siguiendo una serie de reglas o indicaciones.
Los grandes depredadores han fascinado a la humanidad desde la antigüedad. Cuando bucees, te verás inmerso en un entorno que no nos pertenece. Es el territorio de los animales marinos y sus depredadores.
Desde todos los ángulos, el encuentro repentino con un tiburón supera cualquier encuentro con un depredador terrestre que comparte nuestro entorno. Por ello, lo mejor es estar muy atentos, humildes y cuidadosos, conscientes de que la intención de acercarnos a los animales no debe hacernos olvidar los riesgos y las buenas conductas y normas de seguridad a adoptar.
El océano y los tiburones son parte del territorio animal salvaje e impredecible. Aunque estas recomendaciones pueden ser útiles y aplicables en la mayoría de situaciones, no constituyen una garantía absoluta.