Aunque una gran cantidad de tráfico marítimo pasa por sus aguas cada año y cada vez más buceadores vienen a visitarlo, el Mar Rojo sigue siendo una maravilla.
Es uno de los mares con más visibilidad del planeta. Las actividades de pesca son relativamente pequeñas y muy poca industria que contaminan las aguas.
Otra situación son las fluctuaciones de temperatura, que provocan que el agua de mar suba de 30º en verano a poco más de 22º en el mes más frío, oxigenando el agua y manteniendo los corales en óptimas condiciones.
Las corrientes del Mar Rojo también tiene un efecto positivo, aportando nutrientes y manteniendo la cadena de trófica. El 17% de las especies marinas que veremos aquí son endémicas, lo que significa que no las encontraremos en ningún otro océano de la tierra.
Un mar con muchas rutas y sitios de buceo, espectaculares arrecifes de coral, fabulosos naufragios, cuevas, tiburones y más.